La Reserva de la Biosfera de Urdaibai, declarada por la UNESCO hace más de 39 años, es per se un museo vivo con manifestaciones paisajísticas, biológicas, geológicas e histórico-culturales de incalculable valor. Alberga uno de los estuarios mejor conservados del norte de la península ibérica con numerosos hábitats y especies de interés. No en vano, la desembocadura del río Oka ha sido declarada Zona de Especial Conservación para las Aves, Zona de Especial Conservación de la Red Natura 2000 europea y desde 1993 está incluida en la Convención Ramsar, tratado intergubernamental a nivel internacional que ofrece el marco para la conservación y el uso racional de los humedales y sus recursos. Se trata de un estuario estratégico, no sólo para la reproducción de las aves, sino también desde el punto de vista de los flujos migratorios.
A pesar de que es ya una zona muy tensionada por el turismo, las administraciones vascas están impulsando el proyecto de ampliación discontinua del museo Guggenheim Bilbao. Con ese fin pretenden construir dos nuevas sedes que se unirán a través de una senda y pasarelas que atravesarán el ámbito de mayor protección. Se prevé la visita de unas 140.000 personas durante 4 meses al año. Se trata de un proyecto dado a conocer únicamente a través de los medios de comunicación pero que nunca ha sido consensuado ni evaluado desde el punto de vista de su impacto medioambiental y social. Estas visitas se sumarían a los impactos que ya soporta este ámbito protegido.
De hecho, según el dictamen realizado por ornitólogos de reconocido prestigio en 2021 a petición del propio Gobierno Vasco, el estuario está ya sometido a
innumerables presiones relacionadas con las actividades recreativas y el turismo descontrolado. Las molestias causadas por las actividades recreativas son un importante problema de conservación para las aves de la ZEPA de Urdaibai. Actualmente, las principales son las originadas por los paseantes, la navegación (embarcaciones y deportes náuticos) y la recolección de invertebrados para
cebo. Éstas y otros tipos de molestias se producen a menudo de forma simultánea sobre una extensión superficial reducida de forma que las aves carecen de lugares alternativos de alimentación y reposo, poniéndose además en peligro la reproducción de algunas de ellas o limitando su potencial
recolonización.
Por tanto, un incremento del número de visitantes en la zona de máxima protección de Urdaibai es totalmente contraproducente con la conservación de
los valores naturales de la Reserva, así como el emplazamiento de infraestructuras museísticas en el corazón del estuario. La intensificación de usos es la peor de las ideas dada la fragilidad de estos ecosistemas.
En este sentido, se ha de recordar que el objetivo principal de las Zonas de Especial Conservación es el del mantenimiento de un estado de conservación
favorable de especies y de los hábitats que las albergan. Conservar, preservar o restaurar es la premisa. Y el resto de las actividades han de ser sometidas a un
informe riguroso de las repercusiones sobre los objetivos del lugar. La búsqueda de alternativas para otras actividades en otros ámbitos es el caminomarcado por la normativa europea.
Desde SEO/BirdLife y la Pplataforma ciudadana Guggenheim Urdaibai Stop reiteramos una vez más nuestra oposición a un proyecto que no obedece a las
necesidades de la ciudadanía de la comarca ni a una planificación cautelosa de este espacio protegido en clave de sostenibilidad. Es más, este proyecto museístico no se ajustaría a la legislación para la conservación de la naturaleza del ámbito internacional, europeoa, nacional y autonómicoa de conservación dela naturaleza y, además, ha provocado el rechazo de una buena parte de la población local y asociaciones conservacionistas, científicas y del ámbito de la
cultura del País Vasco.
Si este proyecto se materializara se agravaría el actual proceso de deterioro del estado de conservación de hábitats y especies en el estuario de la Reserva de
la Biosfera de Urdaibai. Además, con una mayor afluencia desmedida de visitantes el conjunto de la comarca se resentiría ante un turismo de masas en un espacio ya saturado, con consecuencias negativas en el ámbito natural, cultural y social.
Consideramos necesario que la Salomon R. Guggenheim Foundation desestime el proyecto auspiciado por las instituciones vascas con ayuda del Gobierno de
Madrid. Y al mismo tiempo, es imprescindible que indique a las instituciones responsables de la gestión y conservación de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai que lo que deben primar son políticas coherentes y acordes al marco normativo y al contexto de la transición ecológica, conservación de la biodiversidad, adaptación a la crisis climática y la sensibilidad ambiental de la población local y global. El consenso de políticas activas basadas en la participación pública y de una gobernanza propias del siglo XXI es una necesidad imperiosa.
Compromisos que SEO/BirdLife y la Plataforma Guggenheim Urdaibai STOP piden a la Solomon R. Guggenheim Foundation:
Que exprese su renuncia a la ampliación del museo Guggenheim Bilbao en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai.