La eliminación o destrucción de nidos de golondrinas, aviones, vencejos o cernícalos es una práctica prohibida por la legislación española, europea e internacional. Puede suponer la imposición de multas o incluso llegar a constituir un delito contra la fauna. Es una acción cruel que puede suponer la pérdida de huevos o pollos y la desaparición de colonias de cría para siempre.
Pero, a pesar de la legislación, esta destrucción sigue ocurriendo.
En general, los agentes del ámbito de la edificación y la planificación urbana desconocen la normativa de protección de especies silvestres y no la tienen en cuenta en sus obras y procedimientos, por lo que se incumple sistemáticamente. Además, algunos propietarios destruyen sistemáticamente los nidos de sus viviendas o edificios.
Las especies más afectadas por la destrucción de nidos son en su mayoría aves migratorias, protegidas por la legislación, que están experimentando un progresivo descenso de sus poblaciones en los últimos años, como es el caso de la golondrina común, el avión común, los vencejos común y pálido, el cernícalo primilla, la cigüeña blanca e incluso el gorrión común.
Todas estas aves muestran una gran fidelidad a sus lugares de cría y la construcción de los nidos supone un gran esfuerzo para ellas, por lo que la reutilización de los mismos nidos año tras año supone un gran ahorro energético que favorece la productividad. En el caso concreto de las golondrinas, aviones, vencejos y primillas, la destrucción o desaparición de sus lugares de cría es reconocido como uno de sus principales factores de amenaza.
Para hacer que se cumpla la legislación de conservación de nidos, desde SEO BirdLife, hemos desarrollado dos herramientas: una guía técnica para conservar y fomentar la biodiversidad en obra nueva y edificación y una página web con soluciones arquitectónicas para integrar nidos.
Pero tenemos que hacer mucho más para poner fin a la destrucción de nidos y favorecer la creación de nuevos lugares para nidificar.
Firma nuestra petición para exigir que las administraciones, empresas constructoras y de rehabilitación de edificios integren la conservación de las especies silvestres en los proyectos de edificación.